En el mismo saco

Latinoamérica
por Johan Gonzalez

Ser reportero grafico en Venezuela significa un reto y una responsabilidad enorme para mi, en estos años de crisis y depresión económica que viene devorando al país. Hoy, Venezuela es víctima de un secuestro por parte de una cúpula de políticos corruptos, y una oposición complaciente. Estas líneas que a partir de hoy comienzan estarán dedicadas a los temas más relevantes en cuanto a corrupción y derechos humanos de Latinoamérica. Una oportunidad para analizar los diferentes impactos que suelen tener las malas prácticas políticas y la ambición de poder.

El panorama político de América Latina ha sobresalido en el escándalo por corrupción que se ha dado a conocer tras la detención de Marcelo Odebrecht, presidente ejecutivo de la constructora brasileña Odebrecht S. A en junio de 2015, quién fue acusado por pago de sobornos a cambio de multimillonarios contratos en diferentes países latinoamericanos.

Como consecuencia de su detención y la de altos ejecutivos brasileños salió a la luz pública un documento revelador llamado la “delación del fin del mundo”, que consta de declaraciones de 77 ex ejecutivos de la empresa, donde dan testimonio del caso de corrupción llevado a cabo por Odebrecht. Tales confesiones han puesto a temblar a centenares de políticos de izquierda y de derecha de Brasil, Venezuela, Perú, Guatemala, República Dominicana, México, Argentina y El Salvador, por sus respectivas implicaciones.

A su vez, investigaciones realizadas por El Departamento de Justicia de Estados Unidos, revelan el pago de 788 millones de dólares logrados por mediación de senadores, diputados y ex ministros, como es el caso de Jorge Glas, ex vicepresidente de Ecuador a quien la justicia de ese país sentenció a seis años de prisión. Lo mismo sucedió con el Poder Judicial de Brasil y de Perú quienes han castigado con cárcel a Lula Da Silva y a Ollanta Humala, mientras que Alejandro Toledo tiene orden de extradición de Estados Unidos a Perú desde el pasado año.

El escándalo ha oscurecido al polémico gobierno de Venezuela quien es señalado de ser el segundo país, -después de Brasil-, de recibir más pagos de la constructora. Por tal razón , el 17 de abril del presente año la Asamblea Nacional aprobó el enjuiciamiento del presidente Nicolás Maduro. La ex fiscal Luisa Ortega Díaz, desde el exilio, ha solicitado con presuntas pruebas el arresto del mandatario venezolano (medida que ha sido apoyada por la comunidad internacional), sin embargo el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y la Fiscalía General de la República, asignadas por la Asamblea Nacional Constituyente (AN), de tendencia chavista, ha desestimado la solicitud del parlamento venezolano opositor, tras considerar a esta institución ilegítima y en desacato.

Los implicados en la mega trama de corrupción se ubican en las tendencias políticas de izquierda y de derecha, de los diferentes países Latinoamericanos. Un escenario por donde desfilan presidentes, ex presidentes, diputados, gobernadores y senadores de “diversas corrientes ideológicas”. Pero que en el fondo concuerdan en sus actos delictivos. Incluso las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), también es señalada de recibir pagos desde el año 1990.

Políticos como, Nicolás Maduro, Hugo Chávez, Henrique Carriles Radonski (Venezuela) Luiz Inácio Lula da Silva, Michel Temer, Dilma R. (Brasil), Ollanta Humala, Alan García, Keiko Fujimori, Pedro Pablo Kuczynski, (Perú), Enrique Peña Nieto, Felipe Calderón (México), Cristina Fernández de Kirchner, Néstor Kirchner, Mauricio Macri (Argentina), y Juan Manuel Santos (Colombia) encabezan la lista (hasta ahora no revelada en su totalidad), de los protagonistas de este saqueo al continente.

Personas que ocupan cargos políticos con discursos populistas y “emancipadores”, pero que al final se desentienden de las necesidades de sus propios países. Estos que utilizan sus influencias políticas para el enriquecimiento propio, viciando los concursos de licitación para adjudicar millonarios proyectos al mejor postor.

En recientes declaraciones de Marcelo Odebrecht dijo “Yo no he corrompido a nadie, estos políticos ya eran delincuentes cuando los conocí”

Es descabellada la dimensión del robo a estas naciones, pero no dejará de sorprendernos pues escándalos como este son el más claro ejemplo de la plaga de corrupción que infesta la política latinoamericana.

Hoy a muchas de estas naciones las aqueja la desigualdad y la pobreza, con cifras que a cada año aumentan. Como por ejemplo, Venezuela donde a diario mueren personas por falta de medicamentos, – por citar uno de los tantos problemas en la región-, pero que recibió 98 millones de dólares para la realización de importantes obras, que aún no han sido culminadas.

Johan Gonzalez es un Reportero gráfico venezolano, colaborador para medios impresos y digitales en España, EEUU, Canadá, Colombia, Holanda y ahora colabora con CNY Latino como columnista. Puede ver su trabajo en https://johangonzalez.atavist.com/ o enviarle un correo al johanreporg@protonmail.com o llamarlo al +58 4260852518 para comentario, ideas y opiniones de su columna.