Himno a la última generación
Cuando el amanecer viene y nos despierta, porque es que nosotros no le damos las gracias, por su bendición de su presencia. Si es que por la presencia del sol que podemos comenzar nuestro día como lo hemos hecho en el pasado. Cuando la luna y las estrellas brillan en nuestro cielo nosotros no le demos las gracias por darnos luz durante la noche, por si no fuera por la luna y las estrellas, hubiéramos vivido en constante temor de la oscuridad? No hemos podido, por lo menos esta generación ha fallado en apreciar realmente lo que la última generación ha hecho por nosotros. Han sido testigos de la guerra de Corea y Vietnam, han visto las matanzas hecha en Chile, El Salvador y Guatemala, las dictaduras de Trujillo, Pinochet, la dinastía de los Somoza, Stroessner, y muchos otros. En pocas palabras que han pasado por muchas dificultades.
Por supuesto, todos pasan por momentos difíciles pero ya que esto no quiere decir que no podemos apreciar los que han pasado por lo mismo? Y que los empujaron y prosperado incluso cuando se pasa por momentos difíciles. Algunas veces se nos olvida que nuestros padres y nuestros abuelos, que tienen cada uno su propio pasado lleno de confusión y dificultades, debemos aprender acerca de su pasado, para cuando nuestros hijos han crecido, sabrán que nuestros abuelos llegaron a sus matrimonios en caballos en lugar de un coche o limosina, que a mí me suena más bonito, o el pícaro de actos que nuestros padres habían hecho cuando eran nuestra edad.
La mirada en los ojos al invocar esos recuerdos es una vista bastante contento porque para ellos, es demostrar que todos sus sacrificios no fueron en vano. La única cosa que los ancianos desean y necesitan saber es que toda de su sangre, sudor y lágrimas para nosotros es muy apreciada. Todas esas cosas que se han ido a través de sólo por lo que se puede ser capaz de estar aquí es algo que necesita ser reconocido y apreciado, y nuestra generación aún no puede entender que los ancianos no son solamente personas que le gustan molestarnos sobre nuestros estilos de vida, o que nos quieren mandar de recados para ellos. Es porque cuando ellos eran jóvenes afortunadamente han ayudado a sus padres, abuelos, tíos y tías con placer.
Aunque los tiempos hayan cambiado, eso no significa que no ayudemos a aquellos que se han sacrificado por nosotros. Que no es sólo nuestro padres y abuelos que necesitan ser apreciados, pero sino también son nuestros, tías, tíos, madrinas y padrinos. ¿Porqué? No es solo porque son familia, pero también porque son parte de una cadena que también formamos parte, que no lo pienses así es importante para no destruir la cadena porque cada vínculo es un proceso y forma parte integral en el cumplimiento de esta fuerte y firme cadena.
Por eso, le doy las gracias a la última generación por sus sacrificios, a los que han muerto en nombre de una causa, a los que han sido torturados porque representan una causa, a aquellos que sacrificaron sus vidas con el fin de garantizar el futuro de las generaciones para no pasen a través de lo que ellos han hecho, le doy las gracias a la luna por haber inspirado este pensamiento, y le doy las gracias al sol que me despertó para que yo pudiera escribir este artículo, y también quiero dar las gracias y felicitar a CNY Latino por sus once años de existencia este mes de Febrero y les agradezco sus esfuerzos y también por bendecirme con la oportunidad de trabajar con ellos. No podemos olvidar de todo lo que nuestra última generación han hecho por nosotros.
Acerca del Autor
Mi nombre es David Alfredo Paulino. Tengo veintiún años de edad y estoy actualmente estoy estudiando en SUNY Cortland. Mi mayor es Estudios Internacionales con un concentración en Sistema Político Global y mis concentración secundarias son Antropología , Estudios de Latino América, Asia, y el Medio Oeste. Después que termine mi bachillerato en la primavera del 2015, deseo tomarme un receso de un año mientras continuo contribuyendo a CNY Latino. Después de ese año, voy a unirme al Peace Corps esperando servir en algún país en Latino América. Una vez que termine mi servicio en el Peace Corps, voy a continuar con mis estudios post graduados para obtener mi Maestría, lo mas seguro es que vaya a la Universidad de la Paz en Costa Rica, la cual es una Escuela Sucursal delos Estados Unidos.
Nací en Manhattan, NYC, pero vivo en el Bronx con mi mamá, mi pequeña hermana y mi padrastro. Aunque nací aquí, las mayores de mis mas profundas memorias vienen de mis visitas frecuentes a la Republica Dominicana, y siempre estando allí. Yo aun me quede allí por todo un año debido a mis frecuentes idas y vueltas. Me críe amando esa atmósfera y a veces la añoro mas que la misma ciudad de NY.