Lo que un Pez Sabe
Reseña del Libro: Lo que un Pez Sabe: Las Vidas Interiores de Nuestros Primos Submarinos
Opinión de Linda DeStefano
Traducido a Español por Roberto English
Escrito en el 2016 por Jonathan Balcombe, Director de Sintiencia de Animales en el Instituto para la Ciencia y la Política del Humane Society.
En este libro de tapa dura ($27) se ve coloridas fotos de algunos de los fascinantes peces que Balto presenta.
Balcombe utiliza descubrimientos tanto anecdóticos como científicos para revelar la compleja y variada vida de los peces. Aprendemos acerca de su capacidad para sentir dolor, placer, miedo, estrés, y diversión semejante a otros animales. Es fácil para la gente descontar a los peces dado que viven en otro elemento diferente al de nosotros – el agua – y por que no gritan de una manera que se puede escuchar en el aire. Su comunicación en el agua revela su reacción al dolor.
Balcombe explora cómo los peces perciben su mundo, su vida social, sus variados medios de reproducción. “La principal conclusión que podemos extraer de estos aspectos de lo que un pez sabe es que los peces son individuos, con mentes y recuerdos, capaces de planificar, capaces de reconocer a otros, que son equipados con instintos, y están capaces de aprender tras la experiencia. En algunos casos. Los peces tienen cultura.” (Págs. 176-177)
Los peces no sólo son capaces de formar vínculos entre sí, sino con la gente. Uno de varios ejemplos es la relación entre Grandma (Abuela), un tiburón salvaje, y Cristina Zenato, un exploradora del océano, conservacionista, e instructora certificada de buceo. Zenato dice:
(Grandma) tiene una naturaleza suave e una manera de acercarme con el deseo de ser acariciada y tocada. Ella suele estar muy interesada en venir a mí. Incluso cuando otro escafandrista está allí ofreciéndole comida y yo estoy a cierta distancia, ella se acercará a mí antes que a nadie. A veces cuando la suelto, ella da vuelta pronto y vuelve a mi regazo. (P.145)
Un ejemplo de la naturaleza complicada de la reproducción de peces es que algunos pueden hacer una transición de macho a hembra o viceversa. Otros asumen simultáneamente tanto una identidad masculina como una femenina. Y los caballitos de mar llevan huevos fertilizados en sus bolsas y luego dan a luz a los bebés.
Los peces tienen muchas maneras diferentes de ganarse la vida. Por ejemplo, los peces arquero echan un chorro de agua afilada de hasta diez pies por el aire para capturar un insecto encaramado en una hoja. Por otro lado, los rapes (anglerfish) utilizan su luminiscente tallo y linterna como un señuelo para atraer presa desprevenida.
Balcombe informa sobre muchos experimentos científicos usando peces, los que investigan su inteligencia, habilidades de resolución de problemas, e incluso la amabilidad de uno para un compañero de tanque que tiene problema. Tengo yo un gran problema con los experimentos que infligen dolor a los peces para demostrar científicamente que sienten dolor. Es típica arrogancia humana pensar que la ciencia tiene el derecho de usar a otros seres de cualquiera manera que los investigadores elijan.
Balcombe también tiene preocupaciones éticas sobre algunos de estos experimentos. En el “Epílogo”, Él hace un argumento elocuente y bien razonado para el tratamiento respetuoso y compasivo de los peces.
Apenas he tocado la superficie de la información proporcionada en este libro valioso y revolucionario. Vea por sí mismo llevándolo prestado de una sucursal de la biblioteca del Condado de Onondaga o comprándolo a su librero favorito.
Linda es Presidenta de People for Animal Rights, P.O. Box 15358, Syracuse, NY 13215-0358, people4animalrightscny@gmail.com, (315)488-7877 (8 a.m. – 10 p.m.), peopleforanimalrightsofcny.org